“¿Sabes, Kafka Tamura? Lo que tú estás sintiendo ahora no es otra cosa que el conflicto central de la tragedia griega. No es la persona la que elige su destino, sino el destino el que elige a la persona. Ésta es la concepción del mundo en la que se fundamenta la tragedia griega. Y la tragedia, según Aristóteles, irónicamente, no surge de los defectos del protagonista, sino de sus virtudes. ¿Entiendes a qué me refiero? Son las cualidades, no los defectos, los que arrastran al hombre a la tragedia.”
Kafka en la orilla
Haruki Murakami
Tusquets editores
2 comentarios:
¿Y si el mundo es un caos en equilibrio en el que los defectos de los unos son defectos que se evidencian y compensan por las virtudes de los otros?
Pregunta para los dioses que este blogero no puede responder. Cualquier respuesta sería especulación o, peor aun, respuesta de creyente.
Prefiero la advertencia de Aristóteles.
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